Irene Wais: “Es un error pensar que la naturaleza nos proveerá lo necesario indefinidamente”
La bióloga que se especializa en ecología y evaluación de impactos ambientales explica que la economía circular ayuda a combatir el cambio climático.
Julia Ratowiecki |
febrero 13, 2025

“La economía circular ayuda a combatir el cambio climático”, enfatiza Irene Wais, bióloga que se especializa en ecología y evaluación de impactos ambientales. También, ella explica que, este paradigma protege la biodiversidad, reduce la contaminación, ahorra energía, crea nuevos puestos de trabajo, protege los bienes ambientales de los ecosistemas y hasta promueve el crecimiento económico.

Wais es profesora universitaria de grado y posgrado. Estudió biología (FCEyN-UBA), se especializó en Ecología (Oregon State University, USA) y obtuvo un Posgrado Internacional OEA en Evaluación de Impactos Ambientales (Universidad Nacional Autónoma de México). 

¿Cómo definís la economía circular?
La economía circular, también llamada circularidad, es un modelo de producción y consumo que busca reducir los residuos y extender la vida útil de los productos. Se basa en la reutilización, reparación, renovación y reciclaje de los materiales. A diferencia de la economía lineal, que extrae bienes ambientales comunes (antes llamados “recursos naturales”) para crear productos y desecharlos como residuos. 

¿Cuál es la importancia de incorporar esta modalidad a nuestra vida diaria? ¿Podés mencionar ejemplos de iniciativas de economía circular?
La importancia se basa en los mismos principios de la economía circular: maximizar el uso de los bienes ambientales, reducir la generación de basura, aprovechar al máximo los residuos que se generan como recursos, diseñar productos con una vida útil más larga que minimicen el uso de energía, utilizar materias primas no contaminantes.
El mejor ejemplo se basa en que la naturaleza nunca genera residuos, todo es “reciclado” por el proceso de degradación de los organismos desintegradores (principalmente hongos y bacterias). 

¿Cuál es el mayor obstáculo para incorporarlo en nuestra vida? ¿Cómo proponés solucionarlo?
La inercia al cambio, y pensar que la naturaleza nos proveerá lo necesario indefinidamente, cuando en realidad el espacio y los recursos del planeta son finitos. El primer paso para incorporar la circularidad a nuestra vida es estar bien informados.

¿Qué mensaje te parece clave transmitir?
Lo único permanente en la ciencia es el cambio. Lo que ayer pudo haber sido “bueno y práctico”, como la generación de plásticos, derivados del petróleo o los plaguicidas orgánicos persistentes no biodegradables y acumulables en los ecosistemas, hoy ya no es una opción elegible. La ciencia es la suma de verdades transitorias y en el presente hay nuevas oportunidades de negocios ambientalmente sustentables.